La concejala delegada del Área de Familia e Igualdad de Oportunidades, Rafaela Abad, ha valorado el I Plan Municipal de Servicios Sociales Comunitarios del Ayuntamiento de Almería para el período 2018-2022 como “estrategia diseñada a fin de promover una sociedad inclusiva, donde los mayores sean protagonistas del devenir del propio contexto, social, cultural y económico, en el que se desenvuelven”. Una propuesta basada, además, en una relación de beneficio mutuo y compartido con todos los grupos sociales que conviven en el municipio”, ha insistido en el marco del curso de verano ‘Entornos saludables para las personas mayores’ que imparte estos días la UAL en Almería.
El curso, que persigue concienciar y mostrar iniciativas para la participación activa de los mayores en la sociedad, ha celebrado este miércoles una mesa redonda en la que representantes de diferentes administraciones locales han expuesto experiencias municipales de éxito bajo el título ‘La experiencia de envejecer en un entorno saludable’. En este encuentro, la concejala ha destacado la importancia de convertir el envejecimiento activo en una serie de retos científicos, tecnológicos, sociales, económicos y políticos.
Y en el caso del Ayuntamiento de Almería, el Área de Familia e Igualdad de Oportunidades apuesta “por una participación organizada y activa en pro de potenciar aquellas condiciones que favorezcan el envejecimiento activo como estrategia que acabe por empoderar a las personas y ponga las bases para una sociedad futura sostenible, donde las necesidades de todos los grupos sociales queden cubiertas”.
En este sentido, Abad ha apuntado, entre otras actuaciones, los diferentes talleres de envejecimiento activo que, en colaboración con el voluntariado social, se desarrollan a lo largo del año, los viajes de la tercera edad en colaboración con el IMSERSO, la instalación de parques saludables, y otro tipo de actividades como el homenaje a los mayores, que se organiza en colaboración con el Consejo local de mayores.
Y, por encima de actuaciones concretas, el I Plan Municipal de Servicios Sociales Comunitarios 2018-2022 plantea soluciones a algunas de las necesidades detectadas en el entorno de las personas mayores como son la necesidad de informarles de todos los recursos disponibles para ellos en el sistema público, de favorecer la integración social o una convivencia familiar y social normalizada. Además, busca propuestas dirigidas a fomentar la autonomía personal y la prevención de la dependencia o la atención a la discapacidad, por ejemplo.
Con el ánimo de dar solución a las necesidades detectadas, la concejala delegada del área de Familia e Igualdad de Oportunidades ha explicado en el curso de verano los diferentes programas que desde el Ayuntamiento de Almería se han puesto en marcha o se van a poner en marcha próximamente, dirigidos a paliar esas necesidades. Entre ellos, Abad ha enumerado los siguientes: Programa de información, valoración, orientación y asesoramiento; Programa para la prevención, sensibilización y concienciación social en relación al riesgo social; Programa de atención a las familias; Programa para la promoción de la autonomía personal y prevención de la dependencia; Programa de ayuda a domicilio de los servicios sociales comunitarios; Programa de atención a la dependencia; Programa de gestión del servicio de ayuda a domicilio; Creación del Centro Municipal para la Atención a las personas con diversidad funcional; Programa para la participación social: la cooperación social, el asociacionismo y el voluntariado social; o la Formación de los Profesionales de los Servicios Sociales Comunitarios, entre otros.
Almería no puede olvidar, ha señalado la concejala, que los mayores en el municipio representan el 14% del total de la población. Es decir, que son más de 25.000 personas, de las que la mayoría, son mujeres. Y todo, con la mirada puesta en el año 2050 cuando está previsto que el 30% de la población almeriense sea mayor de 65 años.
Ante este panorama, Rafaela Abad ha insistido en que las administraciones públicas tienen “el reto de empoderar desde la participación a las personas mayores a lo largo de todo el proceso vital”. Y todo desde la perspectiva de la prevención y la promoción de mejores condiciones de vida.