Si se convirtió en leyenda y ejemplo artístico para cientos de artistas y varias generaciones, qué no hubiera pasado si no hubiese fallecido a los 41 años de edad. El Teatro Apolo recibió en la tarde de ayer una mesa redonda sobre Camarón de la Isla, el cantaor gaditano del que se cumplen 25 años de su fallecimiento este mes de julio. Moderada por el especialista y durante muchos años coordinador del Festival Flamenco de Almería, Alejandro Reyes; el experto Rubén Gutiérrez, y los cantaores Juan Gómez y Alfonso Salmerón, sirvió para rendirle homenaje y hablar tanto de anécdotas menores como para analizar su influencia en la revolución que supuso para el flamenco, una actividad complementaria del 51º Festival de Flamenco y Danza de Almería, organizado por el Área de Cultura, Educación y Tradiciones del Ayuntamiento de Almería.
Alejandro Reyes explicó cómo, “en los últimos conciertos que pudo dar su caché era de tres millones y medio de pesetas. El último concierto que ofreció, el del Colegio Mayor San Juan Evangelista, estuvo a punto de no celebrarse, porque venía cansado de su actuación en Nimes el día anterior. Fue Tomatito el que lo convenció ‘para no dejar tirado al paisano’”. Reyes recordó que “se subió al escenario, no saludó, pero estuvo cantando casi una hora, más de los 30 o 40 minutos que solía hacer en los últimos meses”.
Los cantaores Juan Gómez y Alfonso Salmerón recordaron vivencias y coincidencias en varios festivales junto al genio de San Fernando. “Camarón revolucionó y mejoró el flamenco. No hubo palo que no cogiera y que lo hiciera mejor, las bulerías de la Perla o la cartagenera de El Cojo de Málaga son dos ejemplos”, señaló Gómez. Por su parte, Salmerón quiso destacar que “era muy buena persona y muy tímida. Como no sabía decir que no a nadie, por eso acabó como acabó, muy dañado físicamente”. Como cantaor, Alfonso Salmerón aseguró que “cuando escuchaba algo nuevo, en media hora ya sabía hacerlo”.
Por último, Rubén Gutiérrez centró su intervención en la influencia que supuso para la música el disco ‘La Leyenda del Tiempo’, lanzado en 1979. “Grabado como los álbumes británicos y americanos, con mucho alcohol, muchas drogas y haciendo lo que querían en el estudio durante un mes”. Gutiérrez destacó la influencia que tuvieron tanto el productor Ricardo Pachón como el joven Raimundo Amador en la concepción de ese disco, además de las influencias de Jorge Pardo y el rock andaluz de nombres como Triana y Alameda.
Tras los ponentes, hubo un turno de preguntas e intervenciones del público, entre los que destacaron Antonio Sevillano que resaltó que “Camarón siempre ha sido un ídolo en Almería, más aún con la vinculación que tenía con Tomatito”, Norberto Torres o David del Pino. La jornada concluyó con la proyección de la película ‘La Leyenda del Tiempo’, de Isaki Lacuesta, que narra dos historias paralelas, de un niño gitano y una japonesa que quiere aprender flamenco, unidas por el denominador común de la admiración por el cante de Camarón de la Isla.
Hoy habrá una nueva proyección. En este caso del documental ‘13’, de Miguel Poveda, a las 20.30 horas en el salón de actos de la Escuela Municipal de Música y Artes (EMMA) y con entrada libre hasta completar aforo.
El 51º Festival de Flamenco y Danza de Almería está organizado por el Área de Cultura, coorganizado por la Asociación Indanza en el Concurso Internacional de Danza, con el apoyo público de la Diputación Provincial y el patrocinio principal de Cruzcampo. Con la colaboración de la Universidad de Almería, Peña El Taranto, Hyundai, Cosentino, Avenida Hotel y Tony García Espacio Gastronómico.