El alcalde de la capital convocaba cinco minutos de silencio y tres días ondeando la bandera a media asta
Según han manifestado algunos vecinos de la zona, “lo siento, te quiero, he sido yo”, habrían sido las últimas palabras pronunciadas por Ana Julia Quezada en el momento de su detención antes de la una de la tarde por la Guardia Civil en Vícar. Allí vivía junto al padre del niño.
Inicialmente habría negado los hechos afirmando que ella no había sido la autora de la muerte del pequeño Gabriel Cruz, de ocho años, pero tras la evidencia de la aparición del cuerpo sin vida en el maletero de su coche, doce días después de su desaparición, se derrumbaba ante los agentes y dirigía la confesión hacia su pareja desde hace aproximadamente año y medio, el padre de la víctima, separado de la madre, Patricia. En la calle Horacio 16 convivía con Ángel Cruz durante los últimos meses. Seis patrullas de la Guardia Civil cortaron el paso a su vehículo utilitario de color gris.
En los últimos días las investigaciones se iban estrechando en la persona de esta mujer de color, que regentaba una cafetería, como autora del criminal hecho. Las primeras sospechas surgieron al ser ella quien encontró la camiseta del ‘pescaíto’ junto a la balsa de aguas residuales de la depuradora de Las Hortichuelas, a más de cuatro kilómetros de donde desapareció, un camino de unos cien metros de longitud que unía la casa de su abuela, donde por última vez se le vio con vida, con la de sus primos, a la que nunca llegó. Se da la circunstancia que la camiseta fue encontrada en un lugar que ya había sido rastreado con anterioridad sin ser vista. Además estaba seca en una zona en la que el temporal había azotado esos días. En el momento de ‘encontrarla’ Ana Julia se había separado unos metros de Ángel Cruz, por lo que estaba sola y le avisó a él del hallazgo. Al parecer Ana Julia habría vestido aquella mañana, doce días antes del desenlace de los hechos, a Gabriel con esa misma camiseta, hecho que sin embargo ocultó a la Guardia Civil, no añadiéndola como parte de las prendas que llevaba el niño en el momento de su desaparición. Cuando Ana Julia dijo haber encontrado la camiseta despertó las primeras sospechas de los agentes. Al parecer las relaciones entre el niño y la actual pareja de su padre no eran buenas.
Ella incluso se mostró muy unida a Patricia y Ángel durante la docena de días que ha durado la búsqueda, con mucha sangre fría y tanto dolor aparente como los padres de la víctima. Denunció su desaparición junto a la abuela, fue de la mano del matrimonio separado acompañando a las batidas y relató a los medios de comunicación anécdotas como que poco antes de desaparecer Gabriel habían estado hablando con él sobre qué hacer si personas mayores desconocidas se cruzaban en su camino. Las sospechas sobre ella crecieron ante el nerviosismo que evidenció en su declaración ante la Guardia Civil, así que poco a poco se fue confirmando como la primera posible culpable, hasta el punto que era seguida escrupulosamente durante los últimos días. Finalmente era vista sacando el cuerpo de Gabriel del interior de un pozo, por lo que fue inmediatamente detenida y sorprendida con el cadáver oculto por mantas en el interior de su vehículo.
A la sociedad almeriense no le viene de sorpresa este fatal desenlace, puesto que ya durante la reciente concentración que albergó a más de ocho mil personas en la Puerta Purchena de la capital se podía detectar un rumor, silencioso pero evidente, que ponía los ojos en ella como autora del crimen. Ella asistió compungida a esa multitudinaria concentración.
El ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, confirmaba la detención de Quezada al encontrarse el cadáver en el maletero del coche, si bien la Guardia Civil, oficialmente, se limitaba a corroborar sus palabras y a negarse a hacer más comentarios “porque la investigación es secreta”. La casa de la abuela se convirtió durante las últimas horas se convertía en punto de reunión de los familiares ante la fatal noticia, acompañados por la Cruz Roja para atender a los familiares por el grave dolor que tienen que soportar. La autopsia debe revelar cuándo y de qué forma fue asesinado Gabriel Cruz. Un juzgado de Almería se hace cargo de las diligencias de la investigación, que continúa abierta. Cuatro mil personas han estado buscando al ‘pescaíto’ durante una docena de días.
La Diputación Provincial, institución en la que trabaja Patricia, la madre de Gabriel, ha emitido un comunicado de condena del asesinato en estos términos: “La Diputación Provincial de Almería lamenta el triste desenlace de Gabriel Cruz Ramírez, desaparecido el pasado día 27 de febrero en Las Hortichuelas (Níjar). El presidente, Gabriel Amat, ha trasladado, en nombre de la Corporación, el pésame a Patricia, madre del pequeño y trabajadora de la Institución Provincial, y a toda la familia por la trágica pérdida. Amat ha anunciado que la Diputación Provincial va a decretar tres días de luto oficial en la provincia de Almería y la convocatoria de un Pleno extraordinario, el lunes a las 9.30 horas, para trasladar de forma oficial el pésame a la familia de Gabriel.
El presidente ha manifestado la conmoción que ha provocado el fatal desenlace de la desaparición del pequeño Gabriel en la provincia de Almería y en el resto de España.Del mismo modo, Amat ha dado las gracias a las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, al Ministerio del Interior y en particular al ministro, Juan Ignacio Zoido, así como a la Subdelegación del Gobierno, la Delegación del Gobierno de la Junta de Andalucía en Almería, los Ayuntamientos de Níjar y Almería, los trabajadores de la Diputación, los medios de comunicación, los voluntarios, en general, y las numerosas muestras de cariño llegadas desde toda España”.
Por su parte, el alcalde de Almería, Ramón Fernández-Pacheco, decretaba tres días de luto oficial en la ciudad en memoria del pequeño Gabriel Cruz. Desde las 00.00 horas de la noche del domingo y hasta las 00.00 horas del miércoles, la bandera de la ciudad de Almería ondea a media asta en el exterior de los edificios municipales y con crespón negro en las situadas en el interior de los mismos.
Fernández-Pacheco, en nombre de la Corporación municipal, ha expresado su profundo dolor y conmoción por la trágica noticia y convocaba cinco minutos de silencio, a las siete de la tarde del domingo, en Puerta de Purchena, en recuerdo de Gabriel y en solidaridad con su familia, en el mismo lugar donde se celebró la reciente concentración.
Concentración y Pleno extraordinario en la capital
DECLARACIÓN INSTITUCIONAL POR LA MUERTE DE GABRIEL CRUZ
(Salón de Plenos, 11-3-2018)
“Señores portavoces;
Señoras y señores concejales;
Señoras y Señores:
El asesinato del niño Gabriel Cruz nos convoca a todos los almerienses a un escenario de repulsa y duelo que compartimos por igual todos los grupos políticos con representación en este Ayuntamiento, y que de este modo trasladamos al conjunto de la sociedad almeriense.
Nuestros pensamientos están con los padres, familia, amigos y compañeros del pequeño Gabriel, y compartimos su desolación y rabia ante tan brutal e injusto desenlace.
Deseamos que todo el peso de la Ley caiga sobre la persona o personas responsables de este crimen y que la respuesta judicial sea proporcional al enorme y deliberado daño causado.
En nombre de todos los almerienses, queremos agradecer a la Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, así como a Bomberos, Protección Civil y resto de profesionales el ejemplo y tesón mostrado estos días en las complejas labores de rastreo e investigación, así como agradecer su solidaridad a cuantos han participado en la movilización popular sin precedentes que se puso en marcha, tanto sobre el terreno como en las redes sociales, tras conocerse la desaparición del pequeño Gabriel.
La ciudad de Almería permanecerá tres días de luto oficial a partir de mañana, como muestra de respeto y dolor ante un hecho tan execrable que nos han conmovido a todos.
Muchas gracias”.
Más de 18.000 personas guardan cinco minutos de atronador silencio en memoria del pequeño Gabriel Cruz en Puerta Purchena
El alcalde, Ramón Fernández-Pacheco, preside un Pleno Extraordinario en el que, a través de una Declaración Institucional, traslada la repulsa de la Corporación y la ciudad ante un hecho “execrable” que ha conmovido “a todos”
Más de 18.000 personas, según fuentes de la Policía Local, se han dado cita esta tarde, en Puerta Purchena, respondiendo a la llamada del Ayuntamiento de Almería para concentrarse y guardar cinco minutos de silencio en memoria del pequeño Gabriel Cruz, cuyo cadáver ha sido encontrado hoy por la Guardia Civil en el maletero del coche de la pareja de su padre.
Acompañado del delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, del subdelegado del Gobierno en Almería, Andrés García Lorca, y de miembros de la corporación municipal, entre otras autoridades, el alcalde se ha mostrado apesadumbrado ante el “peor desenlace posible para la trágica desaparición del joven almeriense de ocho años, Gabriel, una noticia que ninguno hubiéramos querido leer, oír o ver”, ha lamentado.
Visiblemente emocionado, el alcalde ha querido destacar, una vez más, la respuesta de los almerienses en este acto, “expresando hoy nuestro dolor a la familia, el afecto a esos padres y familiares hoy destrozados, a sus compañeros del Colegio Virgen de Loreto y a todos cuantos le conocían y le querían, además de nuestra rabia por la muerte de Gabriel, un niño que tenía toda la vida por delante”.
Por su parte, el delegado del Gobierno ha insistido en que la investigación atraviesa “momentos decisivos” tras la detención de la sospechosa, por lo que se sigue trabajando en ella. “Sigamos confiando como siempre en la Guardia Civil, en el trabajo que ha hecho y que sigue haciendo”, ha manifestado Antonio Sanz. En esta línea, ha hecho una llamada a la “prudencia” antes de avanzar nuevos datos sobre el relato de la investigación. “Creo que tenemos que esperar”, ha considerado Sanz, quien ha asegurado que aún “no se tienen todos los datos” tras ser preguntado cuándo se podrían tener resultados sobre la autopsia del menor, cuyo cuerpo ha sido trasladado al Instituto de Medicinal Legal (IML). “Se trabaja sobre ello”, ha apostillado al respecto.
Declaración institucional y luto oficial
“Almería hoy, de manera unánime, y sin excepción, desea a Gabriel que descanse en paz”, ha expresado Fernández-Pacheco antes de dirigirse junto al resto de la Corporación municipal al Salón de Plenos de Ayuntamiento de Almería, donde a la ocho de la tarde se ha celebrado un Pleno Extraordinario en el que el primer edil daba lectura a una Declaración Institucional “por el trágico fallecimiento del niño Gabriel Cruz Ramírez”, incluyendo la declaración de tres días de luto oficial, desde las 00.00 horas de esta noche y hasta las 00.00 horas del miércoles, acompañados de la bandera de la ciudad de Almería ondeando a media asta en el exterior de los edificios municipales y con crespón negro en las situadas en el interior de los mismos.
En la declaración leída en el Salón Noble, y tras un solemne minuto de silencio guardado por concejales y asistentes al Pleno, el alcalde ha trasladado la “repulsa y duelo compartida por todos los miembros de la corporación y que de este modo trasladamos al conjunto de la sociedad almeriense”.
“Nuestros pensamientos están con los padres, familia, amigos y compañeros del pequeño Gabriel, y compartimos su desolación”, insistía el alcalde, deseando que “todo el peso de la Ley caiga sobre la persona o personas responsables de este crimen”.
El texto recoge además el “agradecimiento” de la sociedad almeriense a “las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, así como a Bomberos, Protección Civil y resto de profesionales”, por su “ejemplo y tesón” mostrados durante las labores de búsqueda e investigación realizada. Agradecimiento también por las muestras de “solidaridad de cuantos han participado en la movilización popular, sin precedentes, que se puso en marcha, tanto sobre el terreno como en las redes sociales”, una vez conocida la desaparición de Gabriel.
La Declaración Institucional, suscrita y firmada por los veintisiete concejales de la Corporación, recuerda los tres días de luto oficial decretados “como muestra de respeto y dolor ante un hecho tan execrable que nos ha conmovido a todos”, concluye.