La primera medida que tomó Mari Toñi López cuando accedió a la Alcaldía de Garrucha fue la de quitar la bandera nacional que su antecesor había colocado en la rotonda de acceso siguiendo la doctrina nacional del PP. La alcaldesa quitó la bandera y colocó en su sustitución la local, lo que motivó cierta controversia en la localidad.
Pero hete aquí que muchos garrucheros, garrucheras, residentes y visitantes se han sentido atraídos por la curiosa circunstancias del cúmulo de banderas existente en la rotonda, pues donde había una ahora hay nada menos que tres.
Tras convertirse el PSOE en el principal apoyo del PP para formar Gobierno, lo que ha suscitado la consiguiente crisis interna en la organización socialista al haberse sentido traicionados los votantes, no resulta extraño que en Garrucha esté el Equipo de Gobierno emulando al PP.