La consideración por parte del controvertido político Álvaro Ramos de haberse formado una clase vip de escolares en el colegio ExMari Orta ha producido una profunda indigación entre la población inmigrante y entre algún sector social de Garrucha, por considerar que la conformación de clases homogéneas no suponen una discriminación sino una acción para evitarla.
Agrupar a los imigrantes en una clase supone una medida contra la discriminación que sentirían por razones de idioma y educación en una clase multilingüe, que también provocaría un retraso escolar en esta última. Deducen estas fuentes que los argumentos aducidos por el político de IU-Podemos podrían inducir a valorar una acción judicial por si contituyese un supuesto delito al odio contra los inmgrantes que está generando.
Esta denuncia de Álvaro Ramos es considerada por algunos padres de alumnos como un inicio de su campaña electoral a las elecciones autonómicas y comicios municipales.
La escolarización de los niños inmigrantes en los centros es un problema si buen número de ellos no pueden ser escolarizados en el curso que les corresponde por edad, bien por el idioma, nivel de conocimientos o ambos a la vez. La solución puede estar en la clase o clases de apoyo en horario ad hoc de la jornada escolar, según la realidad de los alumnos. Porque no se puede retrasar a los demás. Claro que las clases han de ser homogéneas, nada de listos en un lado y los menos listos al gheto, esto crea complejos, incluso mofas entre los niños, y mal rollo para el maestro (a) que le toque. Los niños emigrantes han de sentirse a gusto, bien acogidos, que reciban cariño para que se integren en nuestro mundo. Es función del equipo directivo y del profesorado, los demás que ayuden y cooperen.
Al que intente la discriminación encubierta que desaparezca, que deje trabajar a quien sabe de esto.
A
La escolarización de los niños inmigrantes en los centros es un problema si buen número de ellos no pueden ser escolarizados en el curso que les corresponde por edad, bien por el idioma, nivel de conocimientos o ambos a la vez. La solución puede estar en la clase o clases de apoyo en horario ad hoc de la jornada escolar, según la realidad de los alumnos. Porque no se puede retrasar a los demás. Claro que las clases han de ser homogéneas, nada de listos en un lado y los menos listos al gheto, esto crea complejos, incluso mofas entre los niños, y mal rollo para el maestro (a) que le toque. Los ni niños emigrantes han de sentirse a gusto, bien acogidos, que reciban cariño para que se integren en nuestro mundo. Es función del equipo directivo y del profesorado, los demás que ayuden y cooperen.
Al que intente la discriminación encubierta que desaparezca, que deje trabajar a quien sabe de esto.
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