César Bona conquistó anoche a las padres y madres de El Ejido con una conferencia magistral, de algo más de dos horas, dónde se mostró plenamente convencido de que otro modelo educativo es posible, una educación basada en la motivación, el respeto, el diálogo, la creatividad, la cooperación y las emociones. De esta manera, el Teatro Auditorio se convirtió en el escenario de esta interesante charla, organizada por las siete AMPAS de Secundaria del municipio y FAPACE en colaboración con el Consistorio y a la que acudieron cerca de 900 padres y madres de todo el municipio, ávidos de conocer técnicas que les ayuden a afrontar con éxito la tarea de educar a sus hijos.
El alcalde de El Ejido, Francisco Góngora, que no quiso perderse esta actividad, se refirió a algunos de los libros publicados por este experto en la materia “como un trabajo excelente del que se puede aprender muchísimo”. Además, Góngora insistió en el “importante papel” que Bona está desempeñando en los medios de comunicación, ya que “está consiguiendo que se hable sobre educación en programas en los que antes nunca se había hecho”. Es más, alcalde ha incidido en la necesidad de que los medios de comunicación den más importancia a la educación, sobre todo si tenemos en cuenta el gran poder de penetración que éstos tienen en la sociedad actual”.
Para Góngora, es evidente que “además de incidir en aspectos relacionados con esta materia, como el trabajar por unas infraestructuras cada vez de mayor calidad, es preciso apostar por la vocación del profesorado” como elemento básico para motivar al alumnado. Es por ello que destacara precisamente este aspecto de Bona, de quien dijo que “es un maestro con mucha vocación, algo que es fundamental en cualquier profesión”; un hecho que, tal y como recordó, “le ha valido situarse entre los 50 mejores profesores del mundo, tras haber sido elegido entre 4.999 candidatos de más de 127 países de todo el mundo”.
Asimismo, el alcalde relató algunos de los aspectos abordados en su primer libro, haciendo hincapié en cuestiones que considera “tan relevantes como el saber escuchar, el conocer a cada alumno, atender al lado más humano de la educación o de la importancia de saber motivar a los escolares”. Para el primer edil ejidense, “todos estos razonamientos son clave en su formación”. Es más, recalcó que “lo que está claro es que un buen profesor influye, en gran manera, en la atención de los alumnos y en que nos pueda gustar más o menos una asignatura”.
Góngora señaló “la empatía, la estimulación de la curiosidad o la cooperación” como vértices del aprendizaje y aludió a la frase extraída de unos de los libros de Bona, “sin el esfuerzo no ha ganancia”, como la base de los valores educativos. De igual modo, apuntó a que “nunca se debe dejar de lado la creatividad y la curiosidad, ya que la educación no es sólo aprender datos sino comprenderlos y disfrutar con ello”. Además, apuntó a la necesidad de incentivar el espíritu crítico entre los niños tanto en lo que ven, oyen y leen; así como de ser capaces de interiorizar, razonar y de buscar el lado más crítico de las cosas”.
Ante un público entregado y participativo, Bona incidió en el argumento de que “el ser humano está hecho de conocimiento y emociones. Una cuestión que no es una moda y que debería de enseñarse incluso en las aulas”. De hecho, tal y como aseguró, “de maestros y maestras depende que, en el futuro, este mundo sea un lugar mejor porque cada día que asistimos a clase tenemos la posibilidad de contagiar e influir con nuestra actitud y con nuestra pasión a todas las personas que ahora son niños pero que rápidamente dejarán de serlo y que, sin duda, serán las personas que tomen responsabilidades, adopten decisiones y lideren todos esos cambios que se producirán en la evolución propia de la sociedad”, subrayó.
Por último, Bona quiso concluir su conferencia haciendo hincapié en las líneas básicas a tener en cuenta por el profesorado para dar paso a un nuevo modelo educativo, en el que “las aulas sean de puertas abiertas a la creatividad de los alumnos”. Y es que para él, los verbos más importantes en educación son escuchar y compartir.